lunes, 20 de octubre de 2014

En la línea anhelada

Hoy>Opinión>cartas del lector
20Minutos>Opinión>cartas del lector
La Voz de Galicia>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector
La Voz de Cádiz>Opinión>cartas del lector
El Correo>Opinión>cartas del lector

Hasta ahora y, al menos en mi entorno más próximo, no conozco a nadie que deba dinero por asuntos personales e ignore la cantidad e identidad de los acreedores. Y en unos tiempos en los que se efectúan más pagos con tarjetas que en metálico, quién no tiene la buena costumbre de contrastar de forma periódica los movimientos e importes descontados en su cuenta bancaria. Lo extraño, ilógico y arriesgado sería mantener una actitud de despreocupación  al respecto. Por ello, una propuesta política como es la de llevar a cabo  auditorías de las deudas contraídas por las administraciones  públicas, lejos de ser percibida por la población como una idea descabellada o una ocurrencia intrascendente, parece situarse en la línea de la transparencia y regeneración democrática anhelada y de la que tanto se habla últimamente. Por qué los ciudadanos (o sea, nuestros hijos y nosotros mismos) deben desconocer en qué conceptos son deudores de 21.400 euros por cabeza.  Si hay voluntad de corregir conductas al objeto de no  caer en la tentación de “vivir por encima de nuestras posibilidades”, ¿no es importante saber de qué van las cuentas?