domingo, 28 de febrero de 2016

Impermeabilización social

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La radio hace compañía, estimula la risa, crea asombro, imprime ritmo, nutre la mente, exhala esperanza y genera lágrimas de indignación o tristeza. Escuchando el testimonio de una mujer que, hace más de trece años, sufrió el secuestro, la violación, el apuñalamiento y el posterior abandono entre la maleza pensando que estaba muerta, me vino a la cabeza el gesto que tuvo el cantante Alejandro Sanz durante un concierto ofrecido en México, interrumpiendo la actuación para reprobar la conducta de un hombre que maltrataba a una mujer. Y es que, según lo manifestado en las ondas por la víctima que sobrevivió a la agresión referida anteriormente, además de las secuelas psicológicas y físicas padecidas desde entonces, aún siente las punzadas causadas por la expresión del magistrado (en referencia al violador) que  atendió y se hizo cargo de su denuncia: <> Aunque el avance no alcanza  la velocidad y profundidad deseada,  parece que el tratamiento de impermeabilización  social aplicado ante la copiosa y tradicional lluvia de atropellos y comportamientos machistas va arrojando resultados satisfactorios. 


jueves, 25 de febrero de 2016

Meteorología y tendencias sociales

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Hace poco escuché decir en la radio a un representante de los notarios  que, debido a la información manejada con motivo del desempeño de su profesión, podría decirse que son testigos directos o espectadores de primera fila de los cambios sociales iniciados en diversos ámbitos. Y según lo dicho días atrás por un profesional perteneciente al gremio conocido popularmente como “hombres del tiempo”, parece que la información solicitada  de manera personal por la población en referencia al pronóstico meteorológico, también ofrece datos respecto a ciertos fenómenos o tendencias de la sociedad. Si  hasta  no hace mucho tiempo, las preguntas más numerosas se concentraban en conocer qué tiempo haría en ciertos lugares del territorio nacional donde se iba a celebrar una boda, bautizo, comunión o reunión familiar, en estos momentos parecen ir dirigidas  a saber cómo estarán las condiciones meteorológicas en determinadas regiones o ciudades extranjeras, pues son cada vez más los familiares que se desplazan a otros países para estar con seres queridos que han emigrado durante los últimos años. Y, a mayor  cantidad de jóvenes obligados a cruzar la frontera, menor  volumen de casamientos, nacimientos y potencial  autóctono.

sábado, 20 de febrero de 2016

El que no corre, vuela

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Hace unos días, me sorprendió leer en la prensa que, fruto de una confusión,  un misil estadounidense fue extraviado durante el transporte aeroportuario  acabando su recorrido en tierras cubanas, donde fue detectado en una inspección y custodiado  en la isla  durante un periodo superior a un año, siendo devuelto recientemente al país propietario del artefacto. Esta mañana, escuché en la radio un fragmento de la declaración efectuada en sede judicial por una persona a la que,  durante un registro policial realizado en su domicilio con motivo de las investigaciones llevadas a cabo en torno a la trama de corrupción Púnica, le  fue descubierto un maletín con un millón de euros en efectivo depositado en un altillo del dormitorio, y uno se queda de piedra con la justificación expuesta: “es posible que fuera dejado allí por alguno de los múltiples trabajadores que pasaron por la vivienda”.  Es decir, el dinero lo pudo dejar un fontanero, albañil, pintor o carpintero. ¡Menudo despiste!,  olvidar las propinas del día en cualquier sitio. Señores, uno debe  estar más atento, que después vienen los problemas.


martes, 16 de febrero de 2016

Doble personalidad

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Al echar una mirada al panorama político, social y económico del momento, cualquiera diría que vivimos en una sociedad con doble personalidad.  De un lado,  lanzamiento institucional de campañas informativas en los medios de comunicación y centros educativos al objeto de sensibilizar y concienciar a la población en materias relacionadas con la seguridad y la salud como, por ejemplo,  la educación  vial, los hábitos alimenticios y la actividad física; la proliferación de productos en las estanterías de tiendas y supermercados con bajo contenido de grasa, de escaso aporte calórico y enriquecidos con  vitaminas; o la organización civil de actividades diversas destinadas a recaudar fondos para financiar investigaciones médicas o adquirir alimentos para personas sin recursos. De otro, desarrollo  de políticas nutritivas y  permeables a los comportamientos codiciosos,   fraudulentos, insensibles  y especulativos; o sea,  impulsoras de una delgadez extrema de los servicios y prestaciones públicas, benévolas con la evasión de capitales, favorecedoras de la indiferencia individualista e incentivadoras  de la desigualdad social sin límites ni escrúpulos. En resumen, muestras públicas de preocupación por el bienestar de la ciudadanía, aunque recetando fórmulas sociales enfermizas (aumento de la pobreza, los suicidios, la inseguridad pública, los trastornos mentales  y la infelicidad). 

sábado, 13 de febrero de 2016

Hay movimiento

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Con el transcurso del tiempo y el embestir repetido de las olas  contra la costa, el mar erosiona y  resquebraja las rocas,  conquista espacio sin echar la vista atrás y  transforma un litoral   que trata de preservar la figura.  Y, cuestiones sociales que hasta no hace muchos años tenían la consideración de contornos naturales  estables, parecen estar debilitándose día a día debido al choque incesante de las olas reivindicativas del progreso.  La violencia de género, la criminalización y discriminación de la homosexualidad, el acoso escolar, el hostigamiento laboral o el  maltrato a los animales   son prácticas que no gozan de buena prensa; el viejo colchón de comprensión y connivencia cultural sobre el que se descansaba plácidamente y tenían buenos sueños tras repartir abusos e  injusticias, pierde consistencia de manera paulatina y   resulta cada vez más incómodo. Queda mucho por hacer, sin duda, pero existe un frente de concienciación y sensibilización social que crece y avanza con la fuerza de la  razón en las manos.


miércoles, 3 de febrero de 2016

Informar u ocultar

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Según han divulgado  los medios de comunicación,  estudios realizados en Estados Unidos indican que el 37% de los adolescentes que fuman se iniciaron en el hábito influenciados por escenas de cine y televisión en las que está presente el humo de los cigarrillos, cuestión que parece  ha sido tenida en cuenta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para recomendar  a los países una revisión de la clasificación de las películas y series televisivas, al objeto de que sean catalogados como filmes destinados al público adulto los que contengan imágenes con personas fumando. Dando  unos pasos más, ¿llegará a proponerse la retirada de la patria potestad a los progenitores que consuman tabaco? Si existe confianza en la efectividad del llamamiento realizado por la OMS, ¿sería conveniente trasladar la sugerencia  a las películas y  videojuegos donde se utilizan armas de fuego,  donde se  ingieren alimentos “basura” o bebidas con alcohol, donde se escuchan frases y presencian comportamientos machistas e, incluso, adoptando una mirada preventiva ante las adicciones tecnológicas, donde salen niños enganchados a las videoconsolas o usando teléfonos móviles? Personalmente, tengo mayor confianza en la educación e información que en la ocultación de la realidad.

martes, 2 de febrero de 2016

Indecencia y desigualdad

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Aun siendo motivo de asombro, tristeza, desencanto e indignación social, parece que la salida a flote del cuantioso volumen de impudicia y precariedad ética que, en los últimos tiempos, contamina el paraje político y  deteriora las costas del bienestar general, también revela e impulsa determinados aspectos   positivos:  la constatación de que  no existe un grado de atrofia institucional que incapacite el funcionamiento de los mecanismos previstos para  inspeccionar, corregir, sanear y sancionar  conductas corrosivas que actúan en la sombra, sin que ello suponga caer en un estado de complacencia y olvido respecto a las necesidades de llevar a cabo obras dirigidas a mejorar los métodos de transparencia, prevención y  filtrado de  sustancias nocivas; la extensión y el refuerzo de una conciencia ciudadana que parecía estar bastante confiada y distraída en los parques de atracciones sociales diseñados al efecto; o la decisión popular de redistribuir el voto estableciendo una mayor competencia política que se supone y espera  contribuya al progreso del país en materias de peso como pueden ser la honradez y la calidad de vida de la población. Indecencia y desigualdad, cuestiones que favorecen la exclusión y debilitan los lazos de la convivencia y el compromiso social.