Cortar el suministro

La Voz de Galicia>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

Los datos indican que el número de mujeres víctimas mortales por  violencia de género en los meses de enero y febrero de 2017 es el más elevado de los últimos catorce años  durante el mismo periodo,  amargos frutos de una tradicional  cultura machista que confunde  libertad con  sumisión y  amor con  posesión. Hace unos días era denunciada la comercialización de disfraces de bombera y enfermera sexy destinados a niñas con más de un año de edad, algo incomprensible y repelente para miradas sanas y equilibradas; asimismo, organismos públicos y privados censuraban la publicidad de una discoteca localizada en Barcelona que ofrecía entrada y consumición gratis más 100 euros en efectivo a las mujeres que acudieran a la misma sin bragas, un reclamo sin pies ni cabeza para mentes adulteradas y de luces cortas. En vez de cortar el suministro de agua  que favorece la reproducción  de la irracionalidad y desconsideración, hay manos  dedicadas a su riego y fertilización.

Robots sin prejuicios

La Verdad>Opinión>cartas del lector

Hoy>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

La evolución, penetración y consolidación de la robótica en la sociedad es una realidad  insoslayable, una cuestión que deberá ser abordada desde la política sin demasiadas dilaciones, pues va a tener una incidencia de calado en materias  significativas como el empleo, donde se pronostica la pérdida de entre 1.500 y 2.000 millones de puestos de trabajo a nivel mundial en los próximos quince años. La revolución tecnológica de los robots está entre nosotros y avanza a un paso desconocido hasta el momento, generando un oleaje de incertidumbres económicas y sociales para el que no parecen haberse construido diques de contención adecuados ni diseñado unas  buenas tablas de surfeo. Aunque  es un asunto tratado principalmente desde  perspectivas ligadas a lo material y productivo,  uno se pregunta cómo impactará en cuestiones sujetas o vinculadas a la dimensión humana.  ¿Contribuirán los robots con inteligencia artificial a reducir las conductas y situaciones discriminatorias en materia de género, inclinación sexual, etnia, religión, aspecto físico u ideas? Cuesta imaginar a un robot que, alterado y dirigiendo la mirada hacia el autómata de al lado, pronuncia con énfasis “mujer tenía que ser”.

Atención y comprensión lectora

La Voz de Cádiz>Opinión>cartas del lector
Hoy>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector

El último informe  PISA (Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos) indicaba que los alumnos españoles lograban situarse por primera vez en la media de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) en  Ciencias y Lectura,  datos que dieron lugar a declaraciones y muestras de satisfacción desde distintos ámbitos. Es llamativo que, cuando una persona propone a los adolescentes que analicen  las letras de las canciones con las que bailan, emocionan y divierten al objeto de identificar  contenidos tóxicos y perjudiciales para la igualdad de género, se monte un revuelo de tres pares, como parece haber sucedido con una musicóloga y consultora de género asturiana. Se puede compartir o estar en total desacuerdo con la interpretación realizada por la profesional respecto a  canciones concretas cuando enciende la alarma y las califica de machistas, aunque es difícil encontrar argumentos para no sumarse a la recomendación  dirigida a los chavales de prestar atención y reflexionar sobre el fondo y la dirección social o cultural señalada en los temas que escuchan. 

Las pensiones de viudedad

Hoy>Opinión>cartas el lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
El País>Opinión>cartas del lector
El Comercio>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

En el edificio donde reside mi madre hay diez viviendas, cinco de ellas ocupadas por mujeres con más de 70 años de edad que van apañándoselas con los  ingresos procedentes de la pensión de viudedad.  Por lo que conozco, sus inquietudes no giran en torno a la variación de los valores bursátiles, la evolución de la macroeconomía o el comportamiento de la cotización del barril de petróleo, sino alrededor de asuntos  cercanos y corrientes:   el trabajo de los hijos, el futuro de los nietos, la cuota de la comunidad de vecinos, la avería imprevista en un electrodoméstico,  la adquisición de  alimentos o la factura de las medicinas. Y de un tiempo para acá se viene escuchando una canción cuya letra añade incertidumbre y desasosiego en el colectivo de personas con una pensión de viudedad (alrededor de 2,3 millones), pues habla de sacar estas pensiones (y las de orfandad) de la Seguridad Social para ser financiadas vía Presupuestos Generales del Estado. Con independencia de los cambios que pudieran llevarse a cabo al respecto, la cuestión esencial es si van a continuar gozando de las mismas garantías y derechos que el resto de pensiones o, por el contrario, pasarían a una situación de desventaja y  mayor desprotección de la que tienen actualmente. Las necesidades elementales de la gente no disminuyen realizando ajustes o encajes de cifras.

No implica renuncia

El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
El Comercio>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

La combinación de factores  de distinta naturaleza puede convertirse en la fuerza motriz generadora de transformaciones en la sociedad que se extienden y consolidan de manera gradual  sin ocasionar estruendos ni revuelos en las calles, como parece suceder con los matrimonios y  divorcios entre mayores de 60 años, que  experimentaron un aumento de aproximadamente el 100%  y el 126% respectivamente, durante la última década. En opinión de los expertos, estos cambios en las relaciones obedecen principalmente al incremento de la esperanza de vida, a la extensión de las relaciones sociales (menor dependencia del apoyo familiar) y a la atenuación y disminución de la religiosidad en la población. Sin embargo,  la decisión de divorciarse o casarse en etapas avanzadas de la vida puede encontrarse con desconcierto, desaprobación y  rechazo familiar, llegando a desavenencias y enfados eventuales o crónicos.  Con  la cabeza lúcida, el corazón deseoso y alas en forma, la condición de ser abuelo no implica la renuncia a emprender el vuelo, no significa que uno deba resignarse a permanecer en un entorno asfixiante, no es impedimento para emocionarse y sentir los latidos de la vida.

La casa por el tejado

El Norte de Castilla>>Opinión>cartas del lector
La Voz de Galicia>Opinión>cartas del lector
La Opinión A Coruña>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

Si no recuerdo mal, creo que fue en el pasado mes de octubre cuando escuché decir a nuestra hija que había compañeros de la facultad proponiendo destinos para celebrar el fin de grado e  iniciando sondeos y gestiones sobre las opciones  relativas a la orla académica. Estaré totalmente fuera de juego porque, la verdad, no acabo de comprender  tanta precipitación  por organizar viajes y formar parte de un retrato colectivo a principios de curso cuando incluso  hay situaciones en las que se arrastran asignaturas  de años anteriores. ¿No es empezar la casa por el tejado?  Estamos en febrero y ya han pasado por el fotógrafo, también hay quienes parecen haber acordado el lugar al que viajar y, por lo visto, ahora tienen que tomar una decisión acerca del local donde llevar a cabo el acto de  graduación en  mayo, antes de realizar los exámenes de recuperación.  Cuánta prisa por figurar en una orla y festejar la finalización de la carrera cuando todavía no se ha llegado a la meta.

Sin certificación ética

El Comercio>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
La Voz de Cádiz>Opinión>cartas del lector

Una recomendación de seguridad a la hora de utilizar regletas o ladrones eléctricos, es  prestar atención al número de aparatos conectados y la potencia consumida cuando funcionan de manera simultánea, procurando evitar sobrecargas que puedan causar efectos indeseados como, por ejemplo, un calentamiento excesivo que produzca el deterioro de cables y enchufes e incluso pequeñas llamas que puedan dar lugar a un incendio. Y eso parece haber sucedido en  la Universidad de Sevilla,  provocando un fuego en el servicio de limpieza que ha saltado a los medios de comunicación.  El enchufe directo de 22 personas (la mayor parte familiares)  en la empresa privada que realiza las labores de limpieza en la institución pública sevillana, por parte de una encargada de la contrata, acabó fundiendo la carcasa de silencio y neutralidad dejando al descubierto las conexiones de nepotismo realizadas conforme a la normativa vigente  <>, es una idea que, aun gozando de  aprobación  u homologación social, no supera las pruebas necesarias para obtener una certificación ética. Hay costumbres y valores que se extienden y penetran en la sociedad como las raíces de los árboles.   

Escasa voluntad global

El Comercio>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
La Nueva España>Opiníón>cartas del lector
La Opinión A Coruña>Opinión>cartas del lector
Diario Sur>Opinión>cartas del lector

Hace unos días, los medios daban a conocer un suceso inusual que acabó con la vida de un matrimonio y su hija de 12 años en Alicante,  sepultados bajo ropa que acumulaban apilada en el piso donde vivían, cuya superficie rondaba los 50 metros cuadrados. La desgracia dio lugar a interrogantes del tipo: ¿estaban dedicados a la compra y venta de ropa?, ¿realizaban una actividad no declarada?  Sin embargo, las incógnitas parecían sobrevolar  la noticia sin acercarse al lugar donde, a mi entender, se encontraba el meollo de la cuestión: la situación de precariedad económica de la familia. ¿Por qué tenían almacenados cientos o miles de kilos de prendas en la vivienda y no en un local destinado a tal fin? ¿Era su deseo y estaban a gusto viviendo en un espacio donde apenas podían moverse, desplazándose con dificultad  entre montañas de tela que les impedían abrir las ventanas y recibir luz natural a su través? La precariedad es un peligro para la salud y la vida de las personas, una enfermedad medieval  presente y muy extendida por el planeta en el siglo XXI. Y, por visto, con una escasa voluntad global para encontrar una vacuna que minimice los estragos causados un año tras otro.  

Precaución con los anillos

El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector

Quien tiene niños pequeños en casa sabe que, bajo el propósito de velar por su integridad física, es conveniente poner protectores en los enchufes situados a su alcance, instalar mecanismos  de seguridad en las ventanas que impidan su apertura, colocar los productos químicos en lugares seguros y comprar juguetes aptos para su edad. En cambio, cuando uno está crecidito y se supone ya es consciente de los riesgos que entraña tirarse a la piscina sin agua, debería abstenerse de introducir el pene en anillos metálicos sin considerar sus dimensiones y adoptar las instrucciones recomendadas al respecto; salvo que se experimenten unos deseos irrefrenables de verse rodeado  y en manos de sanitarios y bomberos.   Es conveniente tener en cuenta que, mientras los aros de acero son objetos inertes que permanecen rígidos, el miembro sexual masculino está vivo y experimenta variaciones de tamaño. Determinados experimentos mejor hacerlos con gaseosa.