jueves, 9 de febrero de 2017

Sin certificación ética

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Una recomendación de seguridad a la hora de utilizar regletas o ladrones eléctricos, es  prestar atención al número de aparatos conectados y la potencia consumida cuando funcionan de manera simultánea, procurando evitar sobrecargas que puedan causar efectos indeseados como, por ejemplo, un calentamiento excesivo que produzca el deterioro de cables y enchufes e incluso pequeñas llamas que puedan dar lugar a un incendio. Y eso parece haber sucedido en  la Universidad de Sevilla,  provocando un fuego en el servicio de limpieza que ha saltado a los medios de comunicación.  El enchufe directo de 22 personas (la mayor parte familiares)  en la empresa privada que realiza las labores de limpieza en la institución pública sevillana, por parte de una encargada de la contrata, acabó fundiendo la carcasa de silencio y neutralidad dejando al descubierto las conexiones de nepotismo realizadas conforme a la normativa vigente  <>, es una idea que, aun gozando de  aprobación  u homologación social, no supera las pruebas necesarias para obtener una certificación ética. Hay costumbres y valores que se extienden y penetran en la sociedad como las raíces de los árboles.