Diario Público>Opinión>cartas del lector
El Periódico de Extremadura>Opinión>cartas del lector(15/11/10)
Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector(15/11/10)
Hombres que ahora son valorados y elogiados por su inestimable contribución al desarrollo de la libertad, justicia y razón como, por ejemplo, Mahatma Gandhi o Nelson Mandela, en otros momentos y circunstancias fueron considerados y tildados de peligrosos, subversivos o desestabilizadores del equilibrado y armónico orden social.
Actuaciones y actitudes industriales o sociales que en el presente son motivo de reconocimiento o felicitación por la sensibilidad y preocupación mostrada en materia medioambiental, fueron solicitadas o propuestas en el pasado por ciudadanos o colectivos que eran identificados o clasificados como románticos idealistas, alborotadores o ecologistas antiprogreso.
¿Habrá un día en que sea inasumible e inaceptable la precariedad y la miseria en un ambiente de concentración de riqueza? ¿Llegarán a ser calificadas de incomprensibles e insensatas las políticas o conductas que conducen al enfrentamiento armado de los pueblos? El ser humano es capaz de transformar el entorno y de crear o innovar nuevas técnicas a una velocidad pasmosa y, en cambio, tiene serias dificultades para desarrollar o modificar los sistemas anti-bienestar que azotan a los ciudadanos y ponen en riesgo la vida en el planeta. ¿Será cuestión de dar más valor al ser que al tener?
Hombres que ahora son valorados y elogiados por su inestimable contribución al desarrollo de la libertad, justicia y razón como, por ejemplo, Mahatma Gandhi o Nelson Mandela, en otros momentos y circunstancias fueron considerados y tildados de peligrosos, subversivos o desestabilizadores del equilibrado y armónico orden social.
Actuaciones y actitudes industriales o sociales que en el presente son motivo de reconocimiento o felicitación por la sensibilidad y preocupación mostrada en materia medioambiental, fueron solicitadas o propuestas en el pasado por ciudadanos o colectivos que eran identificados o clasificados como románticos idealistas, alborotadores o ecologistas antiprogreso.
¿Habrá un día en que sea inasumible e inaceptable la precariedad y la miseria en un ambiente de concentración de riqueza? ¿Llegarán a ser calificadas de incomprensibles e insensatas las políticas o conductas que conducen al enfrentamiento armado de los pueblos? El ser humano es capaz de transformar el entorno y de crear o innovar nuevas técnicas a una velocidad pasmosa y, en cambio, tiene serias dificultades para desarrollar o modificar los sistemas anti-bienestar que azotan a los ciudadanos y ponen en riesgo la vida en el planeta. ¿Será cuestión de dar más valor al ser que al tener?
