viernes, 14 de junio de 2013

A espaldas de esta

El Correo>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector


Según revelaciones realizadas a la prensa por un joven ex informático que trabajó en  agencias de seguridad estadounidenses, las declaraciones amorosas, confidencias sentimentales, conversaciones entre amistades, compromisos sociales y cualesquiera otra clase de comunicaciones personales o privadas llevadas a cabo por los ciudadanos a través de la telefonía e Internet, parece ser que son fruto de un voyeurismo oculto, silencioso y permanente que, aunque ocasionalmente pueda llegar a producir  un estado de  excitación sexual en quienes escuchan u observan,  guarda nula relación con el erotismo.
Si se entiende por democracia la intervención del pueblo en el gobierno, ¿qué decir y cómo definir una vigilancia masiva e indiscriminada de los pasos, sentimientos  e inquietudes de la ciudadanía a espaldas de esta? Si en aras de la prevención y seguridad nacional fuera considerada como eficaz e idónea una medida de semejante calibre, ¿no debería someterse a la reflexión y el visto bueno de las urnas?
A tenor de la evolución global, es obvio que la idea de que cualquier tiempo pasado fue mejor ha tenido poco éxito, pero viendo cómo va el tema, quizás vuelvan las cartas lacradas y las palomas mensajeras.