domingo, 8 de julio de 2012

Pagar a escote

Magazine (La Vanguardia)>cartas del lector

Si  los ciudadanos de a pie no lideran y gestionan las instituciones y políticas del país, ni ocupan sillas en los consejos de administración de entidades financieras, ni dirigen organismos reguladores, ni planifican y promueven la construcción de viviendas, ni gozan de viajes u otras prebendas con cargo a la cuenta de los contribuyentes, ¿por qué se extiende la responsabilidad del descontrol económico de los últimos lustros de manera generalizada?
Por una parte, no todo el mundo ha vivido por encima de sus posibilidades. Por otra, las invitaciones repartidas indiscriminadamente entre la población para participar en la orgía inmobiliaria, fueron facilitadas en las ventanillas de la codicia e imprudencia mientras los encargados de velar por el interés general  parecían disfrutar con orgullo y complacencia del espectáculo montado.
Y ahora, como bien dice Andrés Trapiello en su artículo del 17 de junio de 2012, toca pagar a escote.