martes, 31 de mayo de 2011

Adulterio o distanciamiento político

Opiníón A Coruña>Opinión>cartas del lector
El Montañes>Opinión>cartas del lector

Hay personas que frecuentan las mismas tiendas debido a los lazos sentimentales existentes y a la satisfacción o conformidad con las características y propiedades de los artículos ofrecidos; otras tienen simpatía por determinados establecimientos, aunque no adquieren compromiso de fidelidad con ninguno, pues acuden en función de factores como la limpieza y el orden o las ofertas del día; y también hay quien se siente decepcionado o engañado con el personal y/o la mercancía, y opta por no volver hasta se produzcan los cambios que le seduzcan de nuevo.
Las pasadas elecciones municipales y autonómicas no sólo serán causa de un considerable movimiento de mobiliario, sino que han impulsado una agitación neuronal nada desdeñable tratando de encontrar los porqués de la promiscuidad, adulterio o distanciamiento político de varios millones de ciudadanos. Desde la simplificación y salvando las distancias, podría decirse que la fidelidad a la hora de acudir a las urnas sería algo así como las relaciones creadas entre los clientes y comerciantes del barrio.