La Verdad>Opinión>cartas del lector
El Comercio>Opinión>cartas del lector
El Norte de Castilla>Opinión>cartas del lector
La Voz de Cádiz>Opinión>cartas del lector
Después de varios días seguidos escuchando comentarios en los medios
de comunicación sobre el despliegue policial y las medidas de seguridad
previstas en Madrid con motivo de la final de la Copa Libertadores de América,
y a menos de veinticuatro horas de la celebración del encuentro, la curiosidad
me ha impulsado a leer un poco al respecto y, en mi opinión, la situación
originada alrededor de este torneo internacional de fútbol parece ser un buen
ejemplo para describir el significado del término contrasentido.
La denominación de Copa Libertadores de América es adoptada en 1965 en
recuerdo a las personas que lideraron los movimientos armados que tuvieron
lugar a principios del siglo XIX en distintas naciones del continente americano
para independizarse de España y Portugal, y pasados más de 50 años, la final
del torneo disputada entre dos equipos compatriotas es celebrada en tierras
hispanas a fin de evitar o al menos disminuir la violencia mostrada en su país
de origen.