jueves, 11 de marzo de 2010

Erróneo corporativismo

Lne.es » Cartas de los lectores

Adoptar posiciones corporativistas con el fin de cobijar, proteger o defender a los profesionales que mantienen comportamientos deshonestos, negligentes y despreciativos sin mostrar un ápice de consideración hacia los que sufren sus perjudiciales o nefastas consecuencias, ¿aporta algún beneficio a la sociedad o al propio colectivo?
Favorecer la fermentación de la indecencia y las malas prácticas no proporciona prestigio al gremio ni mejora la calidad del producto, sino que, contrariamente, cultiva la suspicacia o el desafecto. Asimismo, evidencia una escasa clase, una visión social egoísta y reducida. ¿En qué lugar queda la premisa: no hagas al prójimo lo que no deseas para ti mismo?