lunes, 23 de marzo de 2009

Deseos de conocer

Diario Público>>Cartas de los lectores
No resulta fácil comprender la lógica de las personas e instituciones que, debido a un posicionamiento de índole moral, tratan de impedir o se pronuncian en contra de cierta investigación y avance científico enfocado a la curación, mitigación o prevención de enfermedades que menoscaban la calidad de vida o conducen inexorablemente a la muerte de las personas.Si la parte de la población que es favorable a estas prácticas no trata de imponer ni aplicar el beneficioso resultado de las mismas a los que las rehusan, ¿por qué ese empeño en negar a los que sí quieren la posibilidad de esquivar y evitar el sufrimiento? Desgraciadamente, en determinadas épocas y circunstancias, planteamientos dogmáticos amparados por la esfera del poder derivaron en horrorosas ejecuciones de las mentes inquietas y curiosas, de pensadores preocupados por el conocimiento y la prosperidad social. Y, afortunadamente, la implacable corriente proabortista de ideas de cambio y progreso no tuvo el éxito esperado y el incontenible deseo de conocer continúa recorriendo el planeta; es innato al ser humano. Sería deseable que se pusiera la misma voluntad, tesón y esfuerzo para acabar con la fabricación de armamento y la vergonzosa desigualdad imperante.